La esclerosis m´´ultiple (EM) es la enfermedad neurológica más frecuente entre la población de adultos jóvenes. Estadísticamente, su incidencia es mayor en el género femenino.
Los síntomas varían en cada paciente. Pueden producir desde debilidad o la afección de la visión hasta el dolor o la fatiga. Factores como el estrés, el bienestar, el apoyo social o las habilidades para enfrentarnos a las dificultades tienen un gran impacto clínico.
Desde un punto de vista neuropsicológico, entre el 40 y el 70% de los pacientes presentan un deterioro cognitivo. Este, afecta a la atención, la velocidad de procesamiento de la información, la memoria, la función ejecutiva y la percepción visuoespacial.
La duración de la enfermedad o el grado de discapacidad que presentan, se consideran factores de riesgo asociados a un peor rendimiento cognitivo. Pero también el sexo.
El deterioro cognitivo en las mujeres
El comportamiento de hombres y mujeres con EM ante un deterioro cognitivo, es diferente.
Según un estudio realizado por S. López-Álava, J. Olascoaga, J. Aliri y A. Sistiaga y publicado en la revista Neurología, las mujeres con mayor deterioro cognitivo muestran más síntomas de depresión y reciben menos apoyo social.
A la hora de gestionar problemas, se puede hablar de dos maneras de solucionarlo. La primera es gestionando el propio problema en sí y la segunda gestionando las emociones que produce.
En cuanto a las mujeres, sus estrategias a la hora de afrontar un problema, se centran en las emociones que produce. Los hombres con EM en cambio, prefieren atacar directamente al problema y dejar las emociones a un lado.
No existe una estrategia común para enfrentarse a las dificultades que se plantean diariamente. Eso sí, en este estudio se muestra como las mujeres con EM tienen una mayor tendencia a autoinculparse.
Las estrategias de afrontamiento que utiliza cada paciente son un importante medidor de su bienestar psicológico. Además permiten moderar el impacto del estrés sobre el individuo.
Por todo esto, es importante que se estudien los factores cognitivos y psicosociales de la la esclerosis múltiple, diferenciándolos por sexo. Así, se podrán controlar las diferentes variables por sexo y por paciente y aplicar tratamientos más certeros.
La importancia de gestionar estrés en la EM
Las estrategias utilizadas para afrontar los problemas del día a día afecta a la calidad de vida de los pacientes. Acciones como saber controlar y manejar el estrés, adaptarse a la enfermedad o recibir un mayor apoyo social mejoraran esta calidad de vida.
Además, las intervenciones psicoterapéuticas dirigidas al manejo del estrés, serán beneficiosas para tratar la depresión y la fatiga.
¿Cómo ayuda Neural a pacientes con esclerosis múltiple?
Desde Neural recomendamos que, como complemento del tratamiento farmacológico pautado, se inicie un tratamiento rehabilitador. La atención integral de cada paciente, mejorará desde su propia autonomía o control hasta sus capacidades cognitivas.
¿Quieres saber más sobre los tratamientos que ofrece Neural?
Queremos ayudarte.